La ejecucion eficiente para una obra de construcción debe complementarse con la labor de un Gerente Técnico, que asuma todas las responsabilidades que le competen a este cargo. En efecto, abordar solo la ejecución y dependiendo del tipo de proyecto, pudiera ser una labor incompleta de decisiones y sobretodo, de anteponerse en el tiempo a todos los interrogantes que se deben resolver a un sin número de diferentes posturas frente a una traba o un determinado problema que se oponga al logro de los objetivos finales del proyecto.
Un buen Gerente Técnico es el que actúa siempre en forma proactiva, y no permite que los problemas y los interrogantes lo obliguen a tomar decisiones reactivas, que está comprobado, siempre impiden vislumbrar e identificar lo realmente importante, y confundirlo con lo urgente.
Con esta filosofía antes descrita, se logra la entrega de soluciones técnicas y de ingeniería más oportunas, eficientes y convenientes para nuestros proyectos y su dinámica en la operativa diaria de avance. Esta operativa facilita y ordena la participación de todos los actores en la ejecución de una determinado obra de construcción.